Creemos tener la razón, y no queremos "ceder" ante los demás. Buscamos excusas para justificar nuestro enfado una y otra vez.
Esto nos hace estar a disgusto con nosotros mismos, ya que cuando tienes una emoción negativa como es la RABIA, todo tu cuerpo se resiente, y tu alma se enmudece. Es imposible estar EN PAZ y por tanto, tus relaciones con los demás se ven entorpecidas.
Cuanto más tiempo pasas así, más te encierras en ti mism@. Y conforme pasan los minutos, la rabia y el odio se van haciendo más grandes, más potentes..., y cuesta más SALIR de ahí.
¿Cómo salir de esa encrucijada? Cuesta mucho, la verdad. Pero yo creo, que la solución está en hacer lo siguiente:
- Exponer y mostrar tu enfado. Sin esconderlo dentro de ti. Decir cómo te sientes y soltar toda la rabia de alguna forma, como por ejemplo pegar 4 puñetazos a unos cojines, o gritar. No hace falta montar un "espectáculo", ni descargar la rabia con "alguien" en concreto. Puedes hacerlo tu sol@, en tu casa, o puedes HABLAR, sin llegar a insultar ni agredir a nadie, con la/s persona/s que te generaron ese enfado.
- Respirar. Despues de haber "soltado" la rabia, conviene RELAJARSE. Hacer unas cuantas respiraciones profundas ayuda a equilibrar tu cuerpo y tu alma.
- Tomar contacto con la realidad. A veces EXAGERAMOS nuestras emociones, y la reacción que tenemos ante una circunstancia no se corresponde con la causa. Hay que tomar conciencia de nuestro cuerpo AQUI Y AHORA. Contactar con la naturaleza, poner los pies en tierra firme. Y ABRIR LOS OJOS, y ver otras cosas además de lo que motivó ese enfado. Reconocer las cosas positivas y darles su gran valor. De esta forma haremos más pequeño y débil a ese EGO que se empeña en ver únicamente el enfado, y se obceca contra el mundo.
- Y por último, y no menos importante: NO TE SIENTAS CULPABLE. Cuando hayas conseguido salir de tu enfado, no te culpes de lo hayas podido hacer o decir. Si alguien se sintió herido, simplemente puedes pedir PERDON, y ya está! Pero no te niegues a ti mismo. Tu eres así. Y tu enfado forma parte de tu SER. Son momentos que de vez en cuando todos tenemos, y hay que darles su lugar. En lugar de sentirte mal por haberte enfadado, siéntete bien por haber salido de esa emoción. De haber sido capaz de superar tu RESISTENCIA.
A todos los que alguna vez herí con mis enfados, les pido PERDON, y les doy las GRACIAS por entenderme, respetarme, y seguir en mi camino.